Ya, entramos en el Top 10. Impacientes.
Maps & Atlases dejó de ser una banda de math para acercarse peligrosamente al mundo de todo lo que es indie… y eso es algo trágicamente nefasto. Hay un pinche montón de bandas que parecen refritos de otras que son igual de aburridas. Es abrumadoramente tedioso enfrentarse al desmadrito de canciones “feel-good” que no ofrecen nada más que videos simpáticos y ejecuciones inconsecuentes. Afortunadamente para Maps & Atlases, pudieron encontrarse fuera del umbral de ese desastre de copy-cats, al que llamaremos “efecto Vampire Weekend” (ojo, no tengo nada en contra de Vampire Weekend, el odio es a toda la fanaticada de bandas indie copionas).
Beware and Be Grateful es un disco que incorpora la belleza y diversión de esas canciones “feel-good”, pero son construcciones completamente asimétricas. Dentro de las armonías que crea Maps & Atlases hay música angular, esporádicamente destellando el math que los caracterizó para lograr una identidad de banda única.
Tags: Indie Rock, Art Rock, Math Rock
Variation Picks: 03. Winter, 09. Old Ash
Cuál fue mi sorpresa al enterarme de que The Samuel Jackson Five, una de mis bandas favoritas, se afilió a la disquera Denovali, uno de mis sellos discográficos favoritos. Casi tuve un orgasmo al lidiar con esa noticia, pero decidí ser prudente y manifestar mi alegría con una simple sonrisa. El disco homónimo de The Samuel Jackson Five es la acumulación de todo lo que han logrado como banda.
La agrupación nórdica, que tiene el mejor nombre para banda del universo, usualmente es referida como una banda de post-rock, pero ellos ofrecen más que eso. Incorporan jazz, prog e incluso kraut-rock a su sonido, expandiendo las posibilidades de su música a lugares irreconocibles. Es casi el mismo efecto que lo que se percibe en la portada de su álbum.
Tags: Post-Rock, Experimental
Variation Picks: 05. Race to the Self-Destruct Button, 08. A Perennial Candidate
Posiblemente el disco que más me sorprendió este año fue el de Sucré, porque aceptémoslo, la portada es demasiado rosa. Sucré es el proyecto solista de Stacy King (née DuPree), integrante de la banda Eisley. Junto con su marido Darren King de MuteMath y el productor Jeremy Larson, Stacy se embarcó en una aventura que llevó a la creación de A Minor Bird. Lo curioso es que el color rosa de la carátula está justificado perfectamente y eso es lo maravilloso del asunto.
Escuchar a Sucré es algo mágico, las canciones de Stacy están ambientadas para reinos fantásticos; Son piezas dignas de cuentos de hadas. La orquestación es encantadora, en cualquier connotación de la palabra. Y tiene sentido, ya que Stacy y Darren están viviendo la magia de los recién casados. Son pocos los que convierten la miel en algo que es puramente bello para el resto de la gente.
Tags: Dream Pop, Indie Pop, Magic Folkishness (?)
Variation Picks: 05. Chemical Reaction, 09. No Return
El dúo Big Sir ocupa un lugar especial en mi corazón. Los conocí porque Juan Alderete, uno de los integrantes, es bajista de The Mars Volta, una de mis bandas favoritas. Al momento en el que escuché la voz de Lisa Papineau quedé mesmerizado: Big Sir no era cualquier cosa, Big Sir era uno de los mejores proyectos cuasi trip-hoperos que había escuchado.
A pesar de que el sonido es muy bello, la creación de Before Gardens After Gardens fue un proceso muy duro. Juan Alderete había sido diagnosticado con una rara enfermedad de la sangre llamada “policitemia vera” y Lisa Papineau ya sufría de esclerosis múltiple (recientemente fue diagnosticada con cáncer). Este disco fue hecho con emoción pura, pero está canalizada de la mejor manera. Por ejemplo, la canción “Be Brave Go On”, que confieso que me ha sacado alguna lágrima, incluye una frase que ellos usan como una especie de mantra, lo cuál se alinea a sus experiencias: “Be brave and thankful all the way on. All the way, all the brave go on.”
Tags: Trip-Hop, Alternative
Variation Picks: 07. Old Blood, 09. Be Brave Go On
Ya lo había dicho antes, John Zorn podría acaparar prácticamente todo el Top, pero no es la culpa del resto de la población que él sea tan grandioso. La cantidad de música de calidad que crea al año es impresionante. The Gnostic Preludes fue de los primeros discos que sacó este año y definitivamente es música que debería ser considerada universalmente buena. Esto no es cuestión de gustos, ESTO ES BUENA MÚSICA.
En The Gnostic Preludes, John Zorn en realidad no toca ningún instrumento, él se dedicó a componer cada nota de las composiciones y luego fueron entregadas a tres personas para hacer las grabaciones: Carol Emanuel se encargó del arpa, Bill Frisell de la guitarra y Kenny Wollesen del vibráfono. Las reseñas describían a The Gnostic Preludes como la música más bella que ha hecho John Zorn y tal vez estén en lo cierto.
Tags: Avant-Garde, Classical
Variation Picks: 02. Prelude 2: The Book of Pleasure, 05. Prelude 5: Music of the Spheres
WOOOO!! Big Sir!! TE AMO.
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